miércoles, 2 de diciembre de 2015

Apocalipsis 13.4

“y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo:
<< ¿Quién como la bestia y quién podrá luchar contra ella? >> ”. Apocalipsis 13.4.



Con la sanidad milagrosa que recibirá el anticristo se logrará uno de los grandes anhelos que ha esperado satanás desde el principio de los tiempos: recibir la adoración del mundo entero. Aunque esta adoración será sobre la persona de la bestia, indirectamente el diablo recibirá todo la adoración que la humanidad otorgue al anticristo, ya que él es su imagen terrenal.

En otras palabras, tanto el dragón (satanás) como la bestia (el anticristo) recibirán adoración de todos, ¡sí! todos los habitantes de la tierra. Juan observa y es contundente al escribir que toda la tierra se rendirá a los pies de la bestia y el dragón. La humanidad entera le otorgará un reconocimiento nunca antes visto a este gran líder, sentirá gran afecto hacia él, lo admirarán, le rendirán devoción, lo que nunca Dios ha recibido del mundo, lo recibirá la bestia, y ese será la mayor conquista de satanás, quitarle a Dios la alabanza de su creación por excelencia. Recordemos que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios, más no así los ángeles (satanás era un querubín), por tal razón desde el principio ha sido objetivo de lucifer, robarle la adoración que Dios merece como ser supremo y creador de todo.

La adoración que recibirá el anticristo durante su reinado, será la máxima expresión de rebelión humana y el mayor nivel de idolatría que será mostrado a una persona, como nunca antes se ha mostrado a un líder mundial, el anticristo será admirado por toda la tierra. Y es que el ser humano, cuando logra alcanzar una posición importante, su ego parece multiplicarse en gran manera, a tal punto que muchos desean recibir todo tipo de reconocimiento y en muchos casos se origina un culto a la personalidad del determinado líder. Esto es otro ejemplo del desvió en la mente del hombre, querer recibir algo que solo es reservado para Dios.

P. Zanker en su obra “El secreto del éxito de los Julios” menciona como los emperadores romanos, entre los cuales esta Cesar y Octaviano, recibían gran exaltación a su persona, sobre todo luego de sus conquistas; y como si fuera poco, recibían un trato tan exclusivos, como si se tratara de “dioses”.
 En mi libro “Gobierno Global” dedico con capítulo entero al tema del “Culto a la personalidad”, y de cómo a través de la historia, reyes, emperadores y por ultimo presidentes o jefes de estado han querido recibir tanto reconocimiento de su pueblo, a tal punto que muchos llegan a exigir un grado de adoración. Líderes poderosos como Hitler, Franco, Stalin, Kim II-Sung, Hussein, Castro, Chávez, son solo algunos ejemplos de gobernantes que han recibido mucha admiración de su pueblo, con tal grado de fervor, que podemos decir que se ha llegado a adular su persona. En muchos casos, hasta podemos decir que se han idolatrado, como es el caso de II Sung, Hitler y Hussein, a quienes durante sus mandatos se les construyeron estatuas, y se le obligaba a las personas rendirles reverencia.

Hitler fue uno de los grandes líderes mundiales que más se le recuerda por el culto a la personalidad que fue instaurado durante su mandato, prácticamente la adulación a su persona era obligatoria. El Estado nazi se configura como Estado autoritario desde el principio, y la propaganda era el sistema para mantenerse en el poder. Los nazis centralizan todo el poder de los medios de comunicación y los pusieron a su servicio, estableciendo un férreo control y censura sobre sus contenidos. El ministerio más importante durante el nazismo, al que se le dedicaron más recursos, no es, como pudiera parecer, el de la Guerra, sino el nuevo ministerio de la Propaganda, encabezado por Joseph Goebbels. Desde este ministerio, Goebbels hacia extensivo a la inmensa mayoría de los alemanes el culto a la personalidad reportado a Hitler entre los nazis, y los delirantes objetivos de éstos se convertirán en los objetivos de todo un país. (Hechazarreta & López, 2000).

¿Estará un futuro líder mundial propenso a padecer este tipo de mal? Por supuesto que sí. Las consecuencias del poder son muchas, a tal punto que la grandeza del hombre llega a cegarlos y creerse que son seres intocables y dignos de alabanzas. Un gobierno mundial que otorgue a su líder tal cantidad de autoridad sobre el mundo entero, estará muy propenso a dejarse llevar por el poder y asumir posturas de culto a su persona. Y debido al liderazgo que este ejerza, existen seguidores tan fieles, que estarán dispuestos a mostrar una total pleitesía y reverencia, contribuyendo al engrandecimiento de su figura. De ocurrir este suceso, estamos ante la presencia de una bomba de tiempo, ya que un individuo que se crea todopoderoso, pensara que tiene el control de todo y puede asumir acciones incorrectas hacia aquellos que se nieguen a alabar o rendir culto a su persona. Si esto llega a pasar, lo vivido por la humanidad en el tiempo de Hitler, Franco y Mussolini, se estaría repitiendo nuevamente, y con mayores proporciones, debido a que el poder que ostentará esta persona seria mucho mayor al que una vez llegaron a tener estos personajes. El futuro gobierno global estará propenso a sufrir el fenómeno del culto al supremo líder, ya que su máximo dirigente será una figura que gozará de mucho poder y gran popularidad. (Sanjur, 2014).

Y ese futuro “Gobierno Global” del cual escribía en aquel entonces, se verá consumado a su máxima expresión durante los años que gobierne el anticristo; aunque muchos líderes han recibido exaltación, ninguno de ellos ha llegado al nivel de exaltación a la que llegará el anticristo, ya que más que exaltación recibirá la adoración de la humanidad.

Como vimos en el capítulo anterior, el anticristo alcanzará tal nivel de aceptación y aclamación luego de un potente milagro, esta señal será tan maravillosa que causará que la humanidad entera se rinda a sus pies, por tal razón, al igual que lo plantearon otros autores, somos de la opinión que volver a la vida luego de morir parece ser el acto cumbre del anticristo para ganarse el favor del mundo entero. Pero más que el favor del mundo, el anticristo tendrá como objetivo imitar a nuestro Señor Jesucristo. Recordemos que el anticristo se presentara como el mesías que ha de venir, y tendrá que opacar todo lo hecho por Jesús a fin de que la humanidad olvide lo realizado por Jesús y pongan sus ojos en él. Y parece que cumplirá su propósito, ya que la humanidad entera lo adorará.

¿Quién como la bestia y quien podrá luchar contra ella? La humanidad entera lo adorará, y se realizarán dos preguntas con la finalidad de exaltar su persona, al decir ¿Quién como la bestia?, las personas manifiestan la grandeza de su líder supremo y al decir ¿Quién podrá luchar contra ella?, los seres humanos expresan que no hay persona capaz de derrotar a la bestia, es decir declaran su omnipotencia. Ambas son características propias de Dios, pero que las personas se las otorgarán al anticristo.

Charles Ryrie manifiesta que la adoración significa reconocimiento de mérito, y el mérito que la gente reconoce en la bestia es doble: su singularidad (“¿Quién como las bestia?”), y su poder (“¿Quién podrá luchar contra ella?”).
Durante el gobierno del anticristo, él se encargará de concentrar todos los poderes: político, económico y religioso. Hablar de que todo el mundo adorará al anticristo es lo mismo que decir que se rendirá un culto a su persona. En otras palabras el anticristo será objeto de culto, en donde el ser supremo será satanás y ellos fundarán la religión unificada y obligatoria. Todas las religiones sin importar su nombre desaparecerán, por eso indicamos que el milagro de su sanidad será tan maravilloso que musulmanes, budistas, católicos, e incluso los que no creen en la existencia de un ser supremo (ateos), reconocerán la grandeza de la bestia. Todas las religiones, desde la más grande, hasta la más pequeña y extraña, desaparecerán para dar origen a una religión unificada, en donde satanás será el objeto de culto.

En definitiva, el milagro de su sanidad será su acto cumbre para ganarse la mente de las personas, la obra engañadora de satanás llegará a su clímax durante ese tiempo, el mundo entero se olvidará de sus principios y creencias, para adorarlo solo a él.
Un resultado directo de la curación sobrenatural de la bestia es que los moradores de la tierra van en pos de ella. La bestia a su vez conduce a la humanidad a rendir adoración a satanás. La causa de la adoración al dragón es que este ha dado autoridad a la bestia. La bestia es la manifestación visible del dragón en la tierra. Adorar a la bestia equivale adorar al dragón. La tarea suprema de la bestia es precisamente hacer que la humanidad adore a satanás (Carballosa, 1997).

El anticristo será un ser humano con características sobresalientes como muchos, pero al recibir la autoridad de satanás sus habilidades y talentos serán visto como algo espectacular, maravilloso y sobrenatural, en un mundo sediento de señales y respuesta, la sabiduría que tenga el anticristo lo hará ser seguido por la multitud, pero será más sencillo cuando se haga pasar por el mesías, allí muchos serán engañados, en primer lugar los Judíos que creerán que este es Cristo, y en segundo lugar la humanidad entera, quienes pensarán que este Jesús que ha retornado, recordemos que los católicos no creen en el arrebatamiento, pero si creen que Jesús regresará, por lo que al igual que los Judíos serán engañados y pensarán que Jesús ha vuelto cuando en verdad no lo es. Sino un vulgar impostor.
Para el mundo no regenerado, no habrá problema para endiosar a un hombre tan sobrenatural. Si los hombres son capaces de inclinarse ante objetos inanimados y a los distintos ídolos, tanto más le resultara fácil adorar a un hombre tan extraordinario que habrá resucitado solo y estará obrando milagros.

Cristo es el verdadero Salvador del mundo, la verdadera paz y la encarnación divina. La bestia o anticristo es el falso salvador del mundo, la falsa paz y la encarnación de satanás. En Jesús hay luz, en la bestia habrá tinieblas. Jesús es salvación, el anticristo condenación. Jesús lleva al cielo, el anticristo al infierno (Kitim, 1985).

Conclusión:


El tiempo que durar el gobierno del anticristo se caracterizará por una gran alabanza a su persona, como nunca antes se ha visto en la historia de la humanidad. El mundo entero se rendirá en adoración y verán en él, al líder más grande y maravilloso que ha existido. Satanás vera cumplido su propósito, robarle la adoración que solo pertenece a Dios.

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